El machismo es un patrón que engloba actitudes, y comportamientos regidos por y dirigidos a la discriminación y la desvalorización de las mujeres y todo el universo femenino, como consecuencia de pensamientos que consideran que las mujeres son inferiores a los hombres. La cultura y la sociedad se han encargado de transmitir unos estereotipos del hombre y la mujer, tradicionalmente muy marcados, estos estereotipos dan lugar a las actitudes machistas. A pesar de los grandes esfuerzos y movimientos en las últimas décadas, el machismo lejos de estar erradicado, continua presente en nuestra sociedad. Podríamos pensar que el machismo es cosa de personas mayores o de otra época, que hemos avanzado mucho en el tema de la igualdad, sin embargo el machismo es una realidad bastante extendida entre los adolescentes.
El machismo en los adolescentes
El machismo en los adolescentes es una realidad más común de lo que pensamos. Recientes investigaciones, llevadas a cabo por la Dirección General de Atención Primaria de la Consejería de Sanidad, desvelan que el machismo entre los adolescentes está resurgiendo. Determinadas actitudes o formas de pensar que estaban desapareciendo entre los sectores más jóvenes de la población, están calando de nuevo en nuestros adolescentes, tanto chicas, como chicos.
Actitudes y pensamientos machistas en los adolescentes
La mujer es la que se encarga de las cosas de la casa, no es su obligación, pero se le da mejor.
No está bien pegar a una mujer, pero uno puede perder los nervios en un momento determinado. Está claro que si ella no hace nada, no vas a golpearla.
Si el hombre está trabajando fuera, es un detalle que ella prepare la cena. No tiene por qué hacerlo pero es un detalle.
Es normal que mi novio no me deje tener amigos chicos.
Mi chico es muy celoso y hay ciertas cosas que no le gustan.
Etc…
La necesidad de erradicar el machismo
El machismo, hoy y siempre, debe extinguirse y lograr una autentica igualdad. Los estereotipos masculinos y femeninos. Los prejuicios sociales y culturales sobre lo que debe ser o hacer una mujer o un hombre, son solo eso prejuicios que nos condenan a todos, hombres y mujeres. Los estereotipos y el machismo nos condenan a roles prefijados, poco naturales y a la ausencia de libertad. El machismo es una realidad que nos atañe desde hace décadas, es por ello que es fundamental erradicarlo desde las futuras generaciones, antes de que llegue a extender sus raíces. El machismo va en contra de las personas y de los derechos humanos, no por nacer hombre o mujer se es mejor. Educar a las nuevas generaciones en la igualdad es cuestión de todos, es algo que debe procurarse desde la familia y las escuelas.
Por qué este incremento del machismo entre adolescentes
No podemos asegurar cuales son las razones de este incremento en las nuevas generaciones, para ello sería necesario un estudio más exhaustivo y todavía no se ha llevado a cabo ninguno. Los expertos señalan varias hipótesis explicativas, que deben demostrarse:
Las redes sociales y aplicaciones de mensajería, en las que la vida privada se convierte en un postureo que se expone. El día a día de cada uno se convierte en un escaparate que no deja escapar una comida familiar, un café con las amigas y amigos, una salida con compañeros y compañeras de clase. Cualquier actividad de ocio queda reflejada y registrada en las redes, lo que permite por un lado un mayor control, desde lo que hace la otra persona, hasta cuando está empleando la red social o la aplicación. Este control conduce a los celos y se convierte en algo normal.
Los estereotipos femeninos y masculinos transmitidos en las últimas tendencias televisivas y musicales. La tendencia a la hipersexualización y a resaltar el valor de una persona en la sociedad por su valor sexual, conducen al machismo. Con estas tendencias se transmite una imagen de la mujer como objeto que puede pertenecer a alguien.
Trucos para educar en la igualdad
El machismo es un patrón que parte de una creencia, el primer paso es analizar nuestras creencias y nuestros modos de transmitirlas de modo inconsciente, para modificar nuestros actos y dar un ejemplo de verdadera igualdad.
Presta atención a los libros, programas y música que escuchan. Son muchos los estereotipos machistas que transmiten. Una vez identificados puedes, o bien eliminar esas influencias o mejor explicarles que eso no es así, que esas ideas no son así. Por ejemplo en el cuento en el que la madre prepara la comida, mientras el padre se va a trabajar, puedes leerlo, pero aprovecha para contarles que la mamá no tiene que ser la que prepara la comida, que lo normal es que los dos (el papá y la mamá preparen la comida).
Muéstrales un ejemplo de pareja que se ama y están juntos por amor y convicción, no por obligación y control. Nadie pertenece a nadie en una relación, pero ambos se quieren, y respetan.
Procura actividades para la construcción de la igualdad.
Angelica Vega Tola
@educadora
Comments